Umberto Eco - El Nombre de la Rosa

Me encantó locamente este libro, tiene una narración audaz y profunda, filosófica y muy estética, las palabras son bien pensadas con inspiración divina. Lo recomiendo totalmente. Trata de un misterio acerca de unos asesinatos ocurridos en una abadía, haciendo referencia a su vez, a muchos hechos que ocurrían en Europa en el siglo XIII. 

El autor empieza contando en primera persona como descubrió esta historia, que estuvo perdida en el tiempo y que reconstruyó con un toque de gracia para hacerla magnánima. Sin ánimo de resumirla diré únicamente que la historia de los monjes y la biblioteca es mágica, las descripciones y las conversaciones, todo tiene un aire de inspiración celestial, sin embargo, la contextualización de la historia en la realidad, que habla de disputas varias entre monarcas y papas, se me hizo un tanto aburrida. 

Lo oí en audible, me tocó empezar en una velocidad baja para entender el castellano del narrador, pero con el tiempo me acostumbré hasta ir a toda velocidad. Lo tengo en físico también, es un libro bien gordito pero de verdad que sustancioso.

Tiene muchas referencias y oraciones en latín que no dificultan para nada el entendimiento del libro, muchas alusiones históricas y explicaciones de sucesos que facilitan su comprensión. Recomiendo tener claro los personajes ya que intervienen bastantes y me confundí en ocasiones con tantos nombres.

El libro me hizo reflexionar varios temas importantes como la homosexualidad, la represión sexual de los monjes y el papel de la religión a lo largo de la historia.

La homosexualidad porque en medio de la trama queda expuesto las orientaciones sexuales de algunos monjes, y cómo el hábito les sirve de alguna manera para esconderla. Cuentan que tener actos sexuales con una mujer o una monja es mucho mas penalizado que tenerlos con hombres o con niños. Asimismo, lo difícil que es para los hombres el celibato, y la sencillez con la que expían sus pecados sexuales confesándolos entre ellos mismos. 

Opino que la homosexualidad ha sido una constante desde que existimos como raza humana, y que fue precisamente la religión quien nos denegó socialmente esta posibilidad. Me he hundido en largos debates en defensa del homosexualismo, pero debo admitir mi miedo latente de encarar el tema como algo normal, sintiendo esto únicamente para con mis hijas. Es innegable que crecí bajo unas reglas que me cuesta quebrantar. Bendita religión!

Sobre el celibato opino que tuvo su ciencia que los padres de la iglesia vivieran imposibilitados de sexo, viéndolo como pecado y muy seguramente incumpliendo las reglas a cada rato, pues imagino que esto les hacía concentrarse en la fe y en el saber. Pero somos seres humanos y sintientes, los hombres sobre todo, son animales sexuales. Así que está fuera de foco el celibato en la actualidad.    

El papel de la Iglesia me impresionó, en tanto todos aquellos que intervienen en la historia que son miembros del alto clérigo o monjes cualquiera, se consideran de hecho dejando una huella en la historia misma, construyendo el futuro de la humanidad con cada corriente de pensamiento que apoyaban o rechazaban. La historia de los franciscanos, de los benedictinos, la disputa sobre la risa, sobre la pobreza y la importancia que todo aquello tenía en aquel entonces es para mi hoy en día algo de no creer.

La importancia de la biblioteca y de la construcción del saber es como de cuento de hadas, existían monjes copistas, traductores, monjes redactores, pintores, ilustradores, lectores y escritores, de verdad que es increíble. Guardar el saber para la humanidad ha sido todo un desafío para estar donde estamos actualmente.


Mis frases favoritas:

  • Hay lujuria en el dolor.
  • El principio espiritual que la luz encarna es la claritas. Fuente de toda belleza y saber, atributo inseparable de la justa proporción que se observaba en aquella sala, porque de tres cosas depende la belleza, de la integridad o perfección, de la justa proporción y de la claridad y la luz, y en efecto decimos que son bellas las cosas de colores nítidos. 
  • Con un poco de paciencia cualquier escritura secreta puede descifrarse.
  • La hembra es vehículo del demonio.
  • La herejía siempre se reconoce porque va acompañada de soberbia.
  • Supon que un loco quisiera matar a todos los que tocasen polvo de oro, diremos que el que mata es el polvo de oro? Siempre habría creído que la lógica era un arma universal, pero entonces descubrí que su validez dependía del modo en que se utilizaba.
  • La lógica puede ser muy util si se cabe entrar en ella para después salir.
  • El amor bueno quiere el bien del amado.
  • El bien de un libro consiste en ser leído, un libro esta hecho de signos que hablan de otro signos, que a su vez hablan de las cosas, sin unos ojos que lo lean ,un libro contiene signos que no producen conceptos y por tanto es mudo.
  • Esta es la amatista, ese espejo de humildad que nos recuerda la ingenuidad y la dulzura de San Mateo. Esta es la calcedonia, emblema de caridad, símbolo de la piedra de José y de Santiago el mayor; este es el jaspe, que propicia la fe y está asociado con San Pedro; ésta la sardónica, signo del martirio, que nos recuerda a San Bartolome, este es el zafiro, esperanza y contemplación, piedra de San Andrés y San Pablo; y el berilo, santa doctrina, ciencia y tolerancia, la virtudes de Santo Tomas. Que esplendido es el lenguaje d ellas gemas! 
  • El lenguaje de las gemas es multiforme, cada una expresa varias verdades según el tipo de lectura que se escoja, según el contexto en el que aparezcan. 

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