Javier Castillo - La Chica de Nieve

Es un thriller moderno, con lenguaje actual, bien narrado, marcando diferentes tiempos en la historia lo que hace mantener la intriga constante. Fácil de leer y se avanza rápido. 

No puedo decir que me encantó, porque el tema es demasiado fuerte para mí, la historia es sobre la desaparición de una niña y mucho de lo que se narra es sobre el sufrimiento de sus padres. Así pues, yo con mis hijas pequeñas he sufrido mis ojos mientras leía la historia. Y en realidad no es que me haya hecho vibrar el alma por leerla. 

Creo que la historia pierde un poco de emoción en la primera aparición de Kiera, el autor fue dando a conocer poco a poco lo que había pasado con ella mientras que simultáneamente narraba su búsqueda, creo que si le hubiera dado más espera al lector la historia tendría más picante, porque mal o bien se volvió plana en algunos momentos. 

Me quedé con la duda qué pasó con la sangre de Aarón Templeton durante el desfile de Acción de Gracias minutos antes que robaran a su hija. Estuve harta el final encontrando algún sentido para esa intriga y nunca lo resolvieron. 

Es un libro ameno para un viaje, una playa, para entretenerse sin mayor concentración. 

El resumen

El libro comienza situándonos en Nueva York, 1998. Aaron y Grace son un matrimonio que deciden salir con su hija Kiera de tres años, para disfrutar de la cabalgata del Día de Acción de Gracias. Una vez allí, a Kiera le llama la atención un globo que está repartiendo Mary Poppins y ante su insistencia su padre decide llevarla a hombros para comprarle uno. Cuando llegan Aaron baja a su hija y tras unos segundos la pierde de vista, es ahí cuando se desata el pánico. Kiera ha desaparecido.

Tras años de búsqueda, nunca se supo nada de la pequeña Kiera, pero en el 2003 Aaron y Grace reciben una cinta VHS donde aparece una niña jugando, todo apunta a que puede tratarse de Kiera. 

Mientras tanto, se cuenta la historia de Miren Triggs, una periodista que decide investigar la desaparición de Kiera y ayudar a Aaron y Grace. Cuentan la historia de ella, de su búsqueda por Kiera y de su carrera de periodista, sumado a otros asuntos de su vida personal. 

Mis frases favoritas extraídas del libro:

• La esperanza emite la única luz capaz de iluminar las sombras más oscuras.

• Muchos de mis compañeros de clase ya se habían enganchado a un minijuego de una serpiente que perseguía comida por toda la pantalla y no hacían otra cosa durante los cambios de clase. (Refiriendose a la culebrita en el cel)

• No veía necesario estar siempre alerta y dispuesta a llamar mientras hubiese cabinas de teléfono cerca.

• El tiempo es relativo. Y en efecto lo era, pero solo de acuerdo a cuánto sufrías.

• Uno nunca sabe con certeza adónde se dirige el camino que se emprende en mitad de la noche.

• Las sonrisas también tienen colmillos. 

• Pero cuando iluminas una sombra, a veces descubres que lo que se esconde en ella es más oscuro de lo que imaginabas.

• Cuando haya algo que celebrar, agárrelo, amigo, y hágalo.

• Las cosas malas están ahí, esperando, y el calendario entero se llena de ellas sin que te des cuenta.

• La muerte, aunque no lo desees, muchas veces provoca el más sincero de los perdones.

• Con el tiempo descubrí que una parte de mí siempre viajaba a aquel parque en una situación de peligro, aquel momento se había pegado a mi alma para siempre y debía vivir con ello, me gustase o no. Un momento así te cambia, altera todo lo que eres y pretendas ser, aunque es imposible predecir hacia qué lado lo hará.

• Me enamoré sin quererlo ni pretenderlo. Era un hombre formidable. De esos que llegan y te dejan ser quien eres, sin intentar cambiarte, y aman cada rincón de tus defectos, llenando tu vida de fuegos artificiales.

• El valor es peligroso si no eres capaz de medir las consecuencias.